Interesante. Aunque tengo varios comentarios. Las funciòn que las universidades estuvieron relacionadas con la expectativas que las sociedades latinoamericanas esperaban de los estudios superiores: profesionales para el Estado o el ejercicio liberal; eso daba prestigio, autonomìa y construìa una clase media urbana moderna necesaria en nuestra tierras. Pero la dimensiòn económica, en tèrminos del comercio y la industria, era/es una actividad poco entendida por gran parte de la poblaciòn que juzgaba que ese segmento de la población simplemente hace dinero... y no pareciera que para ello se tuviera algún entrenamiento especìfico.
Pero si deseamos vincular la universidad y la industria, no solo la primera debe cambiar sino tambièn la segunda. De nada sirve muchas clases/postgrado de emprendimiento/innovaciòn si del lado industrial no hay interés en la innovaciòn. Nuestros cientìficos venezolanos tempranamente se dieron cuenta de ello, crearon ofertas pero que no hubo respuesta del otro lado. Que los profesores/investigadores no son duchos/hábiles o no tienen destrezas para las tareas de vinculaciòn, es cierto; pero tampoco lo tienen los dirigentes de las empresas que no entienden el papel del conocimiento en los procesos productivos de sus empresas. De allì que las oficinas universitarias de vinculaciòn y afines son necesarias, pero lo primero que tendrìan que hacer es involucrar a los profesores interesados en el emprendimiento/innovaciòn. Hasta ahora, las que conozco sólo son unidades burocràticas.
Pero últimamente ha empezado cambios, debo reconocerlo; se està empezando a cambiar lado y lado; la necesidad ha obligado a cada parte a ello; aunque por distintas razones.
Las Universidades en la búsqueda de alternativas de financiamiento;o la empresas privadas (no incluyo del Estado) porque si desean continuar en el mercado, tienen que considerar otros aspectos ademas de la rentabilidad, los precios.
Espero que la Universidad cambie, especialmente en Venezuela, donde un conjunto de normas,reglamentos, tradiciones mal entendidas conspiran contra la reforma universitaria necesaria que deseamos que Venezuela finalmente entre en el siglo XXI

Excelente artículo. Como profesor universitario y empedernido emprendedor, he tenido que enfrentar esa cultura de claustro, de mirar solo hacia adentro, de alergia a todo lo que signifique relación con la industria y aplicaciones tecnológicas del conocimiento.